Pemones liberan a militares a cambio de permiso minero Los indígenas de Urimán, quienes sometieron el jueves a 43 soldados del Ejército, obtuvieron varias respuestas, excepto en la destitución de Cliver Alcalá Cordones y en la nulidad del Decreto 8.413. Sin embargo, lograron un permiso para la minería en un sector de Canaima. Libertad en cuanto a la minería artesanal, respeto a sus derechos, despacho regular de combustible a precio del mercado, cese de la operación Arekuna y la seguridad de que no habrá represalias fueron los acuerdos a los que llegaron los capitanes pemones tras una reunión de cinco horas con el gobernador de Bolívar, Francisco Rangel Gómez, el comandante estratégico operacional de la FANB, Wilmer Barrientos; y la ministra de Pueblos Indígenas, Aloha Núñez. A pesar de los quince acuerdos, quedan en espera dos exigencias medulares: la destitución de Cliver Alcalá Cordones como encargado del REDI Guayana, y la nulidad del decreto 8.413, que confiere al Estado la potestad de explotar el oro. No hizo falta la presencia del vicepresidente Nicolás Maduro para levantar la protesta. Representantes del gobierno se reunieron con los capitanes indígenas en busca de la liberación de los 42 militares retenidos desde el jueves. Fotos cortesía Natalie García La retención de 43 militares por parte del pueblo pemón en Urimán obligó a las autoridades del Ejército, la Gobernación y el Ministerio Indígena a movilizarse al municipio Gran Sabana en busca de una salida pacífica al conflicto. Ayer durante una sesión de más de cinco horas en el aeropuerto de Santa Elena de Uairén, al sur del estado, los aborígenes expusieron sus quejas. Luego los funcionarios hablaron y, tras un debate, se lograron ocho acuerdos, además de unas obligaciones. Como medidas tácitas se dejó por sentado que no habría represalias en contra de los líderes de la protesta indígena, y que se restablecería el respeto de los militares hacia las comunidades aborígenes y sus habitantes, poniendo así fin a los atropellos y a lista de irrespeto a los derechos humanos que han denunciado desde hace años, y que en parte motivaron la manifestación desarrollada desde el jueves. Fin a las restricciones Además de esto pactaron: la apertura de la actividad minera en el territorio indígena pemón bajo la supervisión de los capitanes generales y comunitarios; el despacho de combustible a todas las comunidades también bajo supervisión y a precio normal del mercado; el cese de la operación militar Arekuna iniciada por la Región Estratégica de Defensa Integral Guayana (REDI-Guayana) en diciembre y la sustitución de su nombre por Plan de Resguardo de la Cuenca del Caroní, ya que Arekuna era el nombre de un cacique y éste no puede ser “empleado para atacar a su mismo pueblo”. Los capitanes defendieron su posición en contra de la presencia militar en las comunidades ancestrales Como cuarto aspecto acordaron destinar tres ambulancias del 1-7-1 Bolívar y un helicóptero de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) a la atención de emergencias terrestres y aéreas en las comunidades indígenas de Gran Sabana; quinto la liberación de los aviones retenidos y la suspensión de las restricciones aéreas hacia las comunidades pero, previo acuerdo con las empresas para que estas regulen los precios de los pasajes a precio justo. Como sexto punto los capitanes generales y comunitarios deberán informar qué áreas serán destinadas para la minería artesanal. En este sentido, los aborígenes se comprometieron a trabajar de manera “ambientalmente responsable” con equipos de “baja cilindrada” y la promesa de recuperación de las zonas por impactar. El acuerdo también dejó sobre la mesa la designación de 1,5 millones de bolívares para la ejecución de proyectos prioritarios en las comunidades, los cuales deberán ser presentados el próximo miércoles en una reunión que sostendrán los capitanes en el despacho del gobernador de la entidad, Francisco Rangel Gómez. Por último fue comisionado Donald Martínez, coordinador de salud del municipio Gran Sabana, para supervisar los transportes para el traslado de emergencias en los sectores indígenas y corroborar que estos estén en buen estado para prestar tan valioso servicio. Militares libres Tras la firma de los acuerdos, los indígenas se comprometieron a liberar a los 28 soldados y 14 oficiales retenidos y desarmados en Urimán, a orillas del Caroní. El fin de la protesta se estableció este mismo sábado en la noche, y a partir de hoy los funcionarios podrán regresar a sus casas. A la cita de este sábado acudieron 22 capitanes comunitarios y cinco capitanes generales, de todos los sectores pemones dentro de la Gran Sabana, a excepción del sector 5. Por parte de las autoridades estuvieron el gobernador Francisco Rangel Gómez, el comandante Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (CEO-FANB), mayor general Wilmer Barrientos; la ministra del Poder Popular para los Pueblos Indígenas, Aloha Núñez, y un viceministro de pueblos indígenas. Los diputados indígenas José Luis González (Asamblea Nacional) y Yaritza Aray (Consejo Legislativo) intentaron estar presentes pero los capitanes se lo impidieron alegando que no se sentían representados por ellos. 22 capitanes comunitarios y 5 capitanes generales asistieron a la convocatoria con el gobernador y la ministra de pueblos indígenas En incógnita Sobre la destitución del mayor general Clíver Alcalá Cordones como comandante del REDI-Guayana no se fijó posición, a pesar de que los voceros indígenas rechazan su presencia y lo acusan de ser responsable de las restricciones que los condujeron a esta manifestación conjunta del pueblo pemón. En cuanto a la nulidad del Decreto 8.413 que reserva al Estado la exploración y explotación del oro, tampoco se llegó a un acuerdo definitivo, aunque se hizo una excepción al permitir el ejercicio de la minería artesanal controlada, lo cual no está contemplado en el instrumento legal. Queda también “en el aire” qué pasará con las comunidades que ejercen minería dentro de zonas protegidas como el Parque Nacional Canaima, y en áreas de la Cuenca del Caroní y sus afluentes, sean estas o no parques, pero sí territorio bajo régimen de administración especial.






